Enseñar y aprender a pensar
El reto hasta ahora era el superar la creencia de que existen “varitas mágicas” que consiguen que el día a día en el aula cambiase de un día para otro. “Hablamos de una educación que se cocía y se seguirá cociendo “a fuego lento”, que necesitaba y necesitará conocer al niño, quién es realmente, y a partir de ahí acompañarlo en su desarrollo, y cuyos resultados se observan más a largo que a corto plazo, y esto es algo que cuesta integrar en una sociedad tan líquida como en la que vivimos actualmente, donde todo va tan rápido, donde la inmediatez en cuanto a los resultados parece estar convirtiéndose en una rutina”. Hablamos de una educación para la vida, de una filosofía de vida, que puede hacer de esta una sociedad mejor. Ahora las familias estáis totalmente involucradas en " enseñar" y " aprender " que son dos verbos que se conjugan juntos. En realidad tod@s estamos siempre en ese reto a lo largo de la vida. Esta circunstancia hace que el papel del niñ@ que s